Antes de que naciera mi hijo, hace unos meses, decidí aprovechar lo que había aprendido insonorizando mi dormitorio y ver si podía insonorizar la habitación del bebé.
Aunque no parezca necesario, insonorizar la habitación del bebé es muy importante. Tu bebé necesitará dormir sin que le despierten las molestias de la casa, y también evitará que sus llantos resuenen por toda la casa y molesten a los demás.
No te preocupes por no poder oír al bebé en una habitación infantil insonorizada, ya que puedes instalar fácilmente un vigilabebés para este fin.
Cómo insonorizar la habitación de un bebé
Si está interesado en insonorizar la habitación de su bebé, quizá no sepa por dónde empezar. Por suerte, ¡estás en el lugar adecuado! A continuación, compartiré todos los consejos y trucos que aprendí al insonorizar mi propia habitación infantil, para que tú y tu recién nacido podáis ser felices en un espacio tranquilo.
1. Insonorización de la puerta
La mayoría de las puertas interiores suelen ser huecas por dentro y, debido a lo finas que son, hacen muy poco para bloquear el sonido. Le garantizo que su puerta principal será mucho más pesada y sólida que todas las demás puertas de su casa. Sin embargo, comprar una puerta nueva puede ser bastante caro, así que le recomiendo que insonorice su puerta actual.
Lo que necesitarás para este proyecto es una manta insonorizante, un barredor de puertas y cinta de burletes.
Puede empezar utilizando el barrido de la puerta para eliminar el hueco debajo de la puerta, sin que ésta deje de funcionar. El barredor evitará que entren ruidos, insectos, suciedad, residuos y cualquier otra cosa que normalmente se cuela por debajo. Antes de comprar un barredor, asegúrese de medir correctamente el hueco bajo la puerta para poder elegir el tamaño adecuado.
Después de cubrir el hueco debajo de la puerta, el siguiente paso es crear un buen sello alrededor de la puerta utilizando cinta impermeabilizante. Uno de los mejores tipos de cinta impermeabilizante del mercado es el Variedad Kanzzy que tiene la capacidad de sellar puertas y ventanas. Esto le permitirá mantener el nivel de ruido exterior en un mínimo absoluto, y mantener a su bebé caliente y cómodo en todo momento.
El último paso es añadir la manta insonorizante a tu puerta. Una de mis mantas favoritas es la Manta de mudanza US CargoY también se sorprenderá de la cantidad de ruido que pueden reducir. Se pueden pegar fácilmente en la puerta o colgar de la pared por encima de la puerta (en una barra de cortina estándar).
2. Considere las cortinas insonorizadas
Por las ventanas de su casa puede pasar mucho ruido, incluso cuando están cerradas. Esto es especialmente cierto si vives en una calle concurrida con mucho tráfico o un tren pasando cada día.
Para solucionar este problema, le recomendamos que invierta en algunos cortinas insonorizadas. Estas cortinas están hechas de tela pesada que ayudará a mantener un montón de ruido no deseado de la habitación en la que están colgados. Están disponibles en varios colores, por lo que no te resultará difícil encontrar un conjunto que combine con la gama cromática de tu cuarto infantil.
3. Añadir moqueta
En poco tiempo, tu bebé estará gateando, así que no hay motivo para que no añadas una alfombra gruesa al suelo de tu cuarto infantil. La moqueta puede contribuir en gran medida a insonorizar el cuarto del bebé, e incluso una simple alfombra puede hacer el trabajo. Estos materiales ayudarán a evitar que el sonido rebote en el suelo de madera y haga eco.
Aparte de las moquetas y alfombras tradicionales, existen en el mercado muchos tipos de moquetas insonorizantes, como por ejemplo este. Sin embargo, si no quiere comprar una alfombra nueva, la moqueta tradicional funcionará eficazmente siempre que sea gruesa y esté limpia.
4. Consigue un Sound Dohm
Intentamos hacer todo lo posible para que nuestro bebé esté cómodo. Pero sin duda, uno de los productos más esenciales que hemos comprado es el Marpac Sound Dohm. Se trata de un pequeño dispositivo que produce ruido de ventilador sin soplar aire y que se utiliza para enmascarar cualquier ruido exterior para que el bebé pueda dormir cómodamente.
5. Decorar la habitación y reorganizar los muebles
Te sugerimos que coloques la cuna de tu bebé contra la pared y, si te sobra alguna estantería, puedes llevártela a la habitación del bebé y llenarla con tantos libros y peluches como puedas. Colocar los muebles contra las paredes compartidas con otras habitaciones evitará que tu bebé oiga una cantidad excesiva de ruido.
También hay algunas cosas más que puedes hacer para decorar tus paredes, como por ejemplo
- Colocación de impresiones artísticas en lienzo de gran tamaño
- Colgando algunos bonitos edredones de tela
- Añadir papel pintado grueso
6. Cuelgue paneles artísticos insonorizados
La espuma insonorizante es uno de los mejores materiales que se pueden utilizar para amortiguar el ruido en casi cualquier habitación, pero no la recomendamos para la habitación de un bebé. En primer lugar, bloquearía por completo todo el ruido, incluido el ruido blanco. En segundo lugar, los paneles de espuma no quedarían bien en la habitación del bebé.
En consecuencia, la mejor opción sería utilizar paneles artísticos insonorizados. Están disponibles en varios colores y son muy fáciles de instalar, limpiar y mantener.
7. Insonorización de las paredes
Una forma excelente de insonorizar las paredes de tu cuarto infantil es utilizar Vinilo cargado en masa directamente en los montantes, o lana mineral entre ellas. El vinilo de carga masiva es uno de los mejores materiales cuando se trata de bloquear ruidos no deseados de todo tipo. Para empezar, basta con cortarlo a la medida adecuada y, a continuación, clavarlo o atornillarlo a los montantes. Es probable que necesites a un amigo o familiar para sujetar el material mientras lo fijas a los montantes.
Otra opción eficaz es añadir una capa adicional de paneles de yeso a cada pared. Esto no será tan eficaz como añadir vinilo de carga masiva, pero aun así notará una gran diferencia en el nivel de ruido de la habitación tras añadir otra capa de material de construcción.
8. Insonorización del techo
Si el ruido entra por el techo, deberías plantearte insonorizarlo. Mejor aún, tal vez puedas bloquear el ruido procedente del suelo de la habitación situada encima del cuarto del bebé (si no está en el último piso de la casa).
Si no tienes acceso al piso de encima de la habitación del bebé, puedes insonorizar el techo instalando más paneles artísticos insonorizantes. Estos paneles suelen ser lo bastante potentes para bloquear el ruido aéreo, como el de la música al sonar o el de la gente hablando.
Sustituir el mal ruido por el buen ruido
Los padres deben entender que no todo el ruido es malo para el bebé. Estudios recientes han demostrado que el ruido blanco puede tener un efecto calmante y tranquilizador en los bebés.
El ruido blanco se refiere básicamente a un ruido con muchas frecuencias de igual intensidad; por ejemplo, el ruido producido por un aire acondicionado o una aspiradora. Sin embargo, puedes conseguir fácilmente un máquina de ruido blanco y colocarlo en la guardería.
El monitor de vídeo para bebés
Al principio de esta guía, mencioné que utilizamos un vigilabebés para poder oír a nuestro hijo en su habitación mientras estamos en otro lugar de la casa. Mi bebé a veces se despierta sin llorar y también hace algunos ruidos suaves que son imposibles de oír cuando la puerta de la habitación del bebé está cerrada, así que decidí que comprar un vigilabebés sería la mejor opción. Con algunos monitores, en lugar de oír al bebé, también puedes verlo.
Conclusión:
Es importante que tu bebé duerma cómodamente toda la noche. Mantener la habitación del bebé en silencio no sólo ayudará a que duerma durante más tiempo, sino que también te ayudará a ti a descansar como es debido y te permitirá ponerte al día con las tareas domésticas.
No dejes este trabajo en suspenso: sigue atentamente los pasos anteriores y estarás listo.
Para obtener más información sobre la insonorización de una habitación de su casa, consulte nuestra guía de insonorizar una habitación del ruido exterior.
imagen: Pixabay; imagen 2: Yan Krukau